Luego de concluir el
2do. Taller de Acciones Legales en Defensa del Medio Ambiente, la
primera impresión podría ser que la lucha por la preservación de la
Naturaleza tenga un sino trágico.
Parecería que la
voracidad por el lucro, la extracción minera de los pocos recursos
naturales que nos quedan, nos llevará a un tobogán de la desesperación e
impotencia.
Sin embargo, esta
realidad que es amarga y dura, sobre todo para aquellos que, parece, no
son sujetos de derecho, el campesino expoliado y agobiado por la presión
de una globalización que no entiende, que les rompe el alma y el
destino, hace de abono para volver a empezar a levantar las banderas de
un mundo para todos y para siempre.
Hemos comido y bebido
juntos, nos hemos conocido un poco más, hemos roto la defragmentación
informativa, y nos hemos quedado con las ganas de seguir viéndonos las
caras.
Las herramientas que
tenemos son pocas y difíciles de instrumentar sin movilización, sin
debate, sin el sentido comunitario e inclusivo que contiene la
esperanza, éste es el camino y el compromiso.
Debemos agradecer a la
Fundación Ambiente y Recursos Naturales, a los organizadores, a la
acogida de los hermanos Santiagueños (que viven hoy un momento de
inflexión social y política), a la Red Agroforestal Chaco Argentina y a
la Mesa Agroforestal Santafesina por el caluroso día vivido.
Queda pendiente cumplir
con los pasos previstos, aquellos que fueron perfilados en las
disertaciones y amasados
cual arcilla en los
talleres: seguir la juntada con organización, estrategia, y con la
sapiencia de que no estamos solos en la defensa del Medio Ambiente.